AMLO mueve al gobierno federal a su favor
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| EL EJÉRCITO HA SIDO EL TEMA DE ATAQUES ENTRE AMLO Y GOBIERNO FEDERAL |
Ahora todos los reflectores están sobre Andrés Manuel López Obrador. Y todo a partir de algunas declaraciones del líder del Movimiento Regeneración Nacional (Morena), al señalar a las Fuerzas Armadas como responsables de “masacres” en el marco de la “guerra contra el crimen organizado”.
En especial hay tres declaraciones de AMLO que conmocionaron a la opinión pública. La primera fue asegurar que en el operativo donde ejecutaron a Juan Francisco Patrón, el “H2”, líder del cártel de los Beltrán Leyva y en donde murieron 14 personas, había menores de edad que fueron acribillados.
La segunda ante el reclamo de un padre de los 43 estudiantes desaparecidos de Ayotnizapa en Washington, en donde López Obrador respondió: “el reclamo (por los 43 normalistas) tiene que ser a Peña, a las Fuerzas Armadas, a quienes intervinieron en ese crimen, no a nosotros”.
Y la tercera, al afirmar que en el sexenio de Calderón, el ejército actuó con total impunidad para realizar “masacres” en sus operativos.
Sin embargo, muy a su estilo, también afirmó que no tiene nada en contra de las Fuerzas Armadas, las respeta e incluso habló de que familiares de militares (que forman parte del pueblo, dijo) lo apoyarán en las elecciones del 2018.
Si AMLO sabe algo, al menos de los 43 estudiantes, sería bueno que lo dijera y ayudara a los padres a terminar con este suplicio que inició la noche del 26 de septiembre de 2014 y todavía no los encuentran.
Pero más allá de esta declaraciones, que son parte del discurso político de AMLO, lo interesante del asunto ha sido la reacción del gobierno federal, un poco tardía y aparentemente sin destinatario –aunque todos saben que son para López Obrador-, como si las palabras del candidato a la presidencia por Morena hubieran sido catastróficas para el Ejército y las Fuerzas Armadas.
Desde Osorio Chong, José Narro, el propio Ejército y políticos de todos los ámbitos, hacen ahora declaraciones criticando las palabras de AMLO y haciendo una defensa -pareciera más de orden moral- del actuar de las Fuerzas Armadas.
“Se confunden y no piensan en la sociedad mexicana, solo atacan a lo más preciado que se tiene para defender a los ciudadanos”, indicó el secretario de Gobernación, Migue Ángel Osorio Chong.
Y refutó a “quienes señalan que las fuerzas federales están siendo ocupadas para atacar a la sociedad, porque no saben que en esas instituciones trabajan mexicanas y mexicanos que protegen a la sociedad”.
¿Pero por qué preocupa tanto al gobierno federal las declaraciones de AMLO? Desde mi perspectiva, solo habría dos motivos de peso como para emprender esto que parece una campaña oficial para defender públicamente a estas instituciones, ya de por sí muy golpeadas por las acusaciones de organismos internacionales de derechos humanos por sus prácticas y violaciones en contra de la sociedad civil.
Así, la primera es que jueguen una doble estrategia en donde utilicen a AMLO para mejorar la imagen pública del Ejército, las Fuerzas Armadas y la estrategia de seguridad y a su vez, golpear la credibilidad del político tabasqueño con miras a las elecciones presidenciales.
La segunda, es que en verdad las declaraciones de AMLO hayan llevado algo de verdad –que, otra vez y muy a su estilo, nunca presenta pruebas- y que antes de que alguien más puede comprobar lo dicho por el líder de MORENA, mejor lo descalifican de antemano.
Lo curioso es que en cualquiera de los dos escenarios, ponen a AMLO justo donde quiere y le gusta estar, en la escena principal de la política nacional, con polémicas de por medio y un juego donde es experto: la confrontación “con la mafia del poder”.
Y si es cierto lo que publica el columnista Miguel Ángel Godínez García en el Excélsior, AMLO es una grave preocupación para la clase política en donde parece que ahora sí, ganará la presidencia.
“Trascendió que en una reunión, Emilio Azcárraga, Leopoldo Gómez y (Federico) Arreola, acordaron la estrategia de favorecer al dueño de Morena, ante la posibilidad de que gane la Presidencia”, dijo el columnista.
¿Será por eso que el gobierno federal implementó esta campaña “sin destinatario”?
