Policías universitarios en Hidalgo
Ya está lista la primera generación de policías con carrera universitaria y otros con carrera técnica en Hidalgo. 68 alumnos (23 de licenciatura y 45 técnicos) del Instituo de Formación Profesional están listos para hacer trabajo de campo en materia de seguridad pública, de investigación y funciones policiacas.
En la entrega de constancias a los egresados, el mandatario José Francisco Olvera Ruiz señaló que “formar ciudadanos que integren cuerpos policiales con una nueva visión, bajo las reglas de la conciencia profesional, capacitados con modernidad y alta tecnología para que combata el delito a la altura que lo demanda la población, es eje primordial de la administración hidalguense”.
No está por demás señalar que el Instituto de Formación Profesional es uno de los pioneros en el país en formar académicamente a los nuevos policías. Esto refuerza el trabajo que realizan los uniformados desde un punto de vista teórico, les da mayor capacidad de análisis y conocimientos en el uso de alta tecnología para realizar su trabajo.
Hidalgo, seguro para los visitantes y ciudadanos
Según el gobierno de Hidalgo, esta entidad es la tercera más segura del país, solo detrás de Querétaro y Campeche. Esta es una buena noticia para los ciudadanos, ya que por un lado se tienen bajos niveles de actos delincuenciales pero por el otro, los cuerpos policiacos ahora están mejor preparados.
Una buena medida preventiva para no permitir que la delincuencia y los índices criminales aumenten.
Y es que una de las causas por las que en muchos estados del país el crimen organizado creció y se volvió poderoso, fue precisamente por el hecho de que los policías y las instituciones de seguridad pública locales, estaban poco preparados y capacitados en todos los sentidos, lo que los volvió más vulnerables a ser corrompidos.
Hidalgo tiene pues la primera generación de policías que egresaron de las aulas, que tuvieron el tiempo suficientes –mientras avanzaban en las materias- para darse cuenta de lo que representa su labor, aceptar su responsabilidad social y ser conscientes de su papel como policías.
Esperemos que esto sea el inicio de un cambio positivo en las corporaciones policiacas para mejorar su imagen ante la sociedad, para dejar de ser vistos como corruptos y autoritarios y rescaten dignamente el alto grado de autoridad social que en algún momento significó ser un policía al servicio de la sociedad.